El Coro Dietrich Bonhoeffer cumple diez años y conmemora con música el legado del pastor -y mártir- que le da su nombre
abril 8, 2025
"La música es una forma importante de expresión de nuestra relación y experiencia con Dios"; destaca Hanna Schram, pastora de la iglesia Luterana El Redentor e integrante de esta agrupación que conmemorará la memoria del teólogo Dietrich Bonhoeffer con dos actividades abiertas a la comunidad, el 9 y 27 de abril.
Todos los miércoles, a las 19 horas, la Iglesia Luterana El Redentor de Providencia recibe a una veintena de coreutas. Tienen entre 19 y 84 años de edad y cada semana trabajan forjando un sonido y preparando los himnos y corales que serán una parte fundamental de las liturgias más importantes del año.
El Coro Dietrich Bonhoeffer fue fundado hace diez años por Italo Riffo, quien actualmente está radicado en Alemania, en honor a ese teólogo que fue ejecutado en un campo de concentración nazi y que, en una situación apremiante, había decidido actuar. De su asesinato se cumplen este 9 de abril 80 años, y por eso la comunidad de esa iglesia y su pastora, Hanna Schramm, invitan a la comunidad a una serie de actividades que serán un ejercicio de memoria y reflexión, y también de música.
Primero, el coro y su directora Vanessa Rojas realizarán un ensayo abierto que será seguido por un diálogo en torno al legado de Dietrich Bonhoeffer, desde las 19 horas del miércoles 9 de abril. Esas mismas obras serán posteriormente interpretadas en un concierto, a las 18:30 horas del 27 de abril, en un encuentro que contará también con la participación del Coro Divertimento. Todo, en la Iglesia Luterana EL Redentor, ubicada en Lota 2.330, Providencia, y con acceso liberado.
Radio Beethoven conversó con la pastora Hanna Schramm y con Vanessa Rojas, directora de la agrupación, respecto del quehacer de este coro y del legado y la vigencia actual del pensamiento y el ejemplo de vida de Dietrich Bonhoeffer.
Hanna Schramm nació en Dresden y estudió teología en Leipzig antes de completar su vicariato de dos años en Chile. Fue ordenada en 2014 en la Iglesia El Redentor por el obispo Siegfried Sanders. Es la primera mujer que ocupa ese cargo en este templo. Además de ser pastora, es integrante del Coro Dietrich Bonhoeffer.
¿Por qué es importante para la Iglesia Luterana El redentor contar con un coro estable? ¿Cuán relevante es para ustedes conmemorar sus diez años de existencia?
«El coro tiene múltiples funciones. Por un lado, es una instancia de encuentro de las personas en nuestro templo, y también es un coro que netamente nos invita a practicar nuestra fe. La mayoría de las canciones que se cantan hablan de la experiencia religiosa, de la relación con Dios y también de las complicaciones que vivimos; los corales, los himnos hablan de eso, están llenos de una expresión de fe, pero también de dudas. Y se cantan muchas veces también tradicionales del cancionero y canciones más modernas. Es nuestra creencia que la música en sí es un regalo de Dios que nos permite expresar nuestra fe y también invocar y comunicarnos con Dios, experimentar a Dios. Por eso existe una larga tradición coral en las iglesias luteranas. Para nosotros ha sido muy bonito tener ya por diez años un coro propio de nuestra comunidad, que es algo que no existía antes. Sentimos que es un gran logro y que ha pasado también por dificultades, porque se fue hace algunos años la persona que fundó el coro, que es Italo Riffo, tuvimos después otra directora y ahora una nueva directora, que encontramos a través de una convocatoria y quedó. Estamos contentos y contentas por eso».
La pastora Hanna Schramm durante una celebración dominical.
Profundicemos en la figura que le da el nombre al coro. ¿Quién fue Dietrich Bonhoeffer? ¿Por qué es una persona relevante para la comunidad?
«Dietrich Bonhoeffer es importante para la historia de las iglesias luteranas, de las iglesias protestantes tradicionales porque fue una persona que tuvo una visión muy crítica en el tiempo del nacionalsocialismo. Él decidió no participar en la iglesia oficial que tuvo que alinearse con la política de Hitler, con la dictadura, con la ley y sus obligaciones, por ejemplo, cumplir con la desvinculación y la expulsión de cristianos de origen judío. Él fue muy crítico con eso. Participó en la formación de la iglesia confesante, que era una ocupación eclesiástica alternativa. Finalmente, por su convicción y por su visión de cómo él entendía a Jesucristo actuando en el mundo, en el sentido de que no puede haber expulsiones o un trato que busque eliminar a ciertos grupos de seres humanos, Bonhoeffer decidió sumarse a la resistencia contra Hitler, e incluso participa en una ocupación que buscó hacer un atentado contra Hitler. Él no participó haciendo un acto violento, pero sí participó en un grupo organizando reuniones, haciendo nexos con el extranjero y compartiendo información al respecto. Y él dijo ‘yo sé que es un acto donde me echo encima una culpa, yo asumo eso’. Pero él sintió que no hubo otra alternativa para evitar más muertes y más acciones que iban en contra de lo que para él es el actuar de Jesús en el mundo. Entonces su forma de vivir la fe nos invita a reflexionar, en estos tiempos, sobre nuestros propios actos y sobre cómo queremos vivir la fe. Nos lama a reflexionar y, en ese sentido, él es importante».
El suyo es un pensamiento que sigue vigente y él es una figura que ilustra no sólo su época, sino también el compromiso con la vida es parte de la fe.
«Sí».
¿Cuáles son los roles que cumple el Coro Dietrich Bonhoeffer?
«El Coro Dietrich Bonhoeffer presenta las obras que ha practicado en sus ensayos en distintas ocasiones; en los cultos dominicales, sobre todo en fechas especiales como Semana Santa, Pentecostés, la celebración de la Reforma, el tiempo de Adviento en Navidad. Entonces, estas obras nos ayudan a hacer más solemnes y significativas estas distintas fechas con ciertas obras elegidas para esas ocasiones. También apoya el canto comunitario y el canto de la liturgia, y organiza conciertos, presenta obras en conjunto con otros coros en distintas ocasiones, por ejemplo, en la celebración de la Reforma y de Navidad, así como otras fechas importantes durante el año eclesiástico. De esta manera, enriquece mucho la vida comunitaria, tanto en los ensayos como en las presentaciones».
Vanessa Rojas O’Shee.
Vanessa Rojas O’Shee asumió la dirección del Coro Dietrich Bonhoeffer hace un año. «Recibí un coro un poco tímido, con gente que no confiaba mucho en lo que podían hacer. En este ha me tocado prepararlos en voz y en repertorio, así que ha sido un año de reconocimiento mutuo, entre ellos y yo. Ha sido muy lindo», comenta.
La contralto porteña se formó en la Facultad de Artes de la Universidad de Chile, con Fernando Lara y Carmen Luisa Letelier. Integra el Coro Sinfónico de la Universidad de Chile, donde es jefa de su cuerda, y ha actuado como solista en diversos repertorios, tanto musicales como operáticos y enseña en el Conservatorio de la Universidad Mayor.
Vanessa Rojas explica que es un el Coro Dietrich Bonhoeffer es comunitario, amateur, y litúrgico, «por lo que durante el año debemos preparar varias liturgias. Algunas son fechas importantes, por ejemplo, la Reforma, Navidad y Semana Santa. Sin embargo, queríamos además hacer conciertos, por cierto que con un repertorio esencialmente luterano, donde hay grandes compositores.; está por ejemplo Johann Sebastian Bach, que es el más conocido. Empezamos con algo del propio Martín Lutero, la canción Ach Gott, vomHimmel sieh darein, que es entre monodia y polifonía. Martín Lutero es de la época de la polifonía, pero consideraba que era muy confusa para la gente, que no entendía nada, entonces él simplificó la música para que las personas que iban a las iglesias pudiera entender el texto y participar de la alabanza, de la adoración. Entonces hemos trabajado bastante monodia, unísonos y cosas a cuatro voces, a dos voces, a tres voces, principalmente de la liturgia. Tienen un himnario muy importante, con muchos himnos históricos y significativos. Pero también he querido añadir piezas de otros autores, por ejemplo de Bach, corales que son simples, y este año decidí abordar un Bach un poquito más complejo. Así es que empezamos a ver números de la Cantata BWV 4, que tiene la particularidad de que no es larga, y que tiene algunos números que son para una voz. Por ejemplo, hay una línea que es completamente para los bajos, otra para los tenores, y hay una línea a dos voces para soprano y contralto. Además, tiene el coral final y dos piezas más para todo el coro. Es bien interesante. Ha sido muy satisfactorio, porque yo les he dado harto ánimo para que se atrevan a abordar cosas más grandes; es un trabajo bien interesante».
Actualmente tienen 20 integrantes, de entre 19 y 84 años, y están buscando tenores. «El grupo es bastante constante, la gracia es que en general tienen muy buena asistencia, y son muy comprometidos con el coro. Siempre se pasa bien, se logran cosas muy bonitas. Todos los que quieran integrarse, desde adolescentes y jóvenes hasta adultos, son bienvenidos», asegura Vanessa Rojas.
¿Cómo es el ritmo de ensayos del coro?
«Como son todas personas de distintas actividades sólo podemos ensayar una vez por semana y esto es el miércoles de siete a nueve de la noche, pero a veces hacemos ensayos extras sábado o domingo, según la necesidad. Pero la verdad es que para ser tan poco tiempo de ensayo, el trabajo es óptimo».
Dietrich Bonhoeffer 1906-1945()
«Dar al coro el nombre de Dietrich Bonhoeffer tenía el sentido de mantener presente y aprender de su ejemplo de una fe viva en Dios, su entrega por sus profundas convicciones cristianas y destacar que la música es una forma importante de expresión de nuestra relación y experiencia con Dios», destaca la pastora Hanna Schramm.
«Dietrich Bonhoeffer nació el 4 de febrero de 1906 como el sexto de ocho hijos de una familia burguesa, hijos de un siquiatra y una profesora, quien hacía música con sus hijos; cantaban himnos de la iglesia. Fue pianista aficionado, pero su fascinación por la teología fue más grande y así se convirtió en teólogo. La música le seguía acompañando toda la vida. Bonhoeffer tenía una mente brillante como todos sus hermanos. Con solo 24 años no solo había terminado su trabajo de doctorado, sino también el vicariato, que es la formación práctica para ser pastor. Bonhoeffer tuvo la suerte de viajar a distintas partes del mundo: Italia, Libia y su vicariato lo hizo en Barcelona. Fue becado a Nueva York, donde conoció el trabajo pastoral práctico y descubrió la música negro spiritual. Ya siendo pastor ordenado, trabajó entre 1933 y 1935 como pastor en Londres. Entonces, conoció distintas culturas y visiones al mundo que le abrieron la mente. Como docente privado trabajó dando cátedras en la universidad», agrega la pastora de la Iglesia Luterana El Redentor.
Hanna Schramm explica que Bonhoeffer y su familia vieron en forma muy crítica la toma de poder del nacionalsocialismo. «En su reflexión ‘La Iglesia ante la cuestión de los judíos’, comenta que ‘si la Iglesia ve que el estado no trabaja o trabaja demasiado para implementar orden y derecho no sólo se encuentra en la situación de curar las victimas bajo la rueda, también debe caer en las ruedas’ para frenarlas y evitar víctimas», detalla.
La pastora Hanna Schramm.
Por eso, Bonhoeffer fundó una alianza de emergencia para proteger a colegas descendientes de judíos, conocida c omo Pfarrernotbund, y propuso la salida de la Iglesia oficial. «En 1935 comenzó a liderar el centro de formación para los pastores de la Iglesia Confesante, Bekennende Kirche, una Iglesia alternativa a la evangélica oficial en Alemania, Deutsche Evangelische Kirche, y que criticaba la alianza de la Iglesia oficial con Hitler. Después de dos años es cerrada por los nacionalsocialistas y sigue de manera ilegal en otros lugares hasta 1940», relata.
«Cuando Bonhoeffer sintió que el trabajo desde la Iglesia no era suficiente para evitar los daños causados por la dictadura de Hitler decide sumarse a un grupo de resistencia contra la dictadura nacionalsocialista que planificaba un atentado contra Hitler», revela la pastora.
Fue detenido en abril de 1943, y también fueron apresados su hermano Klaus Bonhoefer y su cuñado Hans von Dohnanyi. El teólogo estuvo en la cárcel en Berlín, por un año y medio. Más adelante es trasladado al campo de concentración de Buchenwald y en abril de 1945, al campo de exterminio de Flossenbürg. El 5 de abril de 1945 Hitler ordena la ejecución de todos que han participado en conspiraciones con él. Dietrich Bonhoeffer es sentenciado a muerte el 8 de abril y, un día después, es asesinado junto a otros compañeros de la resistencia.
Manuscrito del poema Von Guten Mächten, de Dietrich Bonhoeffer.
«En los meses de arresto escribe cartas que reflejan su relación con Dios y también escribe varios poemas, uno se llama Von Guten Mächten treu und still umgeben (De poderes buenos fiel y silenciosamente rodeado). Su texto es muy conmovedor y describe una profunda confianza en el cuidado de Dios. Fue musicalizado y se canta mucho en las Iglesias protestantes en Alemania en recuerdo a Bonhoeffer», indica la pastora Schramm.
Esta canción es una de las obras clave que se podrán escuchar en las dos actividades que tienen planificadas en la Iglesia Luterana El Redentor para el mes de abril. El poema, explica Hanna Schramm, lo escribió en el Año Nuevo de 1944.
«Refleja un poco su sentir en ese momento. Evoca la protección, el cuidado, el estar acogido en Dios a pesar de que la propia vida de uno esté amenazada. O sea, está absolutamente pasando lo peor y él, estando en la cárcel, esperando su destino, igual busca conectarse con Dios a través de esta canción y vive la presencia de Dios. Esta canción tiene dos melodías, una más moderna y un poco más lúdica, más alegre, y otra más solemne, más tranquila, y se canta mucho en las iglesias. Se canta siempre en Año Nuevo y también cuando uno quiere justamente poner énfasis en esa experiencia de una fe profunda en un Dios que está con uno cuando uno pasa lo peor, tal como Jesús mismo pasó lo peor en la cruz. Esta canción refleja muy bien la esencia de nuestra fe, de confiar en Dios en tantos momentos de la vida», reflexiona la pastora.
Inicios del coro, con su primer director y fundador, Italo Riffo.
La actividad del 9 de abril se titula «Conmemorando» y se efectuará a las 19 horas en la Iglesia Luterana El Redentor, que se ubica en Lota 2.330, metro Los Leones, con acceso liberado.
Tiene, como explica la pastora Hanna Schramm, dos objetivos. «Recordar a Dietrich Bonhoeffer en el aniversario de 80 años desde su asesinato por el régimen nazi, y reflexionar sobre quién era él, cuál es su legado y de qué manera inspira a nuestra vida y estimula nuestra fe en Dios, sobre todo cuando estamos también en una situación donde tenemos que tomar decisiones importantes y debemos activar nuestra fe para superar algún desafío o complicación. También queremos en esta actividad agradecer y celebrar los diez años de nuestro coro y conectar la reflexión sobre Bonhoeffer con el ensayo de canciones que han sido significativas para nuestro coro y que representan muy bien nuestra fe luterana; va ser un ensayo abierto y también una oportunidad para comenzar a integrarse al coro. Y queremos cerrar esta actividad con un momento de convivencia y de intercambio, donde comemos y tomamos algo y podemos justamente celebrar, como también Bonhoeffer celebró la vida. Él fue una persona a la que le gustó mucho vivir, conoció muchas partes del mundo y también gozó de la vida. No era una persona amargada, triste, sino muy alegre; tuvo muchos amigos, compartió con muchas personas y sabía mucho disfrutar la vida. Queremos, en el fondo, invitar a lo mismo», detalla.
El coro en 2019.
La complementa Vanessa Rojas, directora del coro. «Vamos a mostrar repertorio que estamos trabajando con el coro; un himno con texto de Dietrich Bonhoeffer que es unísono, vamos también a trabajar un coral de Bach a cuatro voces, que es Jesu Meine Freude y vamos a cantar el último coral de la Cantata BWV 4. La idea es que la gente pueda ver cómo trabaja un coro, escuche las diferencias entre las cuerdas, las distintas voces que tenemos y distintos tipos de repertorio. Junto con eso, también vamos a reflexionar un poco acerca de lo que es la vida coral, que es algo muy hermoso. Es algo familiar, hay gente de distintas edades, de distintas ocupaciones. No tenemos cantantes profesionales, sin embargo, con mucho entusiasmo y con mucho trabajo se puede conseguir un resultado óptimo», indica.
¿Cuáles son las próximas actividades que tendrá el Coro Dietrich Bonhoeffer después del 9 de abril?
«Luego viene la preparación de Semana Santa, que vamos a estar en liturgia. Y más adelante tenemos un concierto para celebrar nuestro aniversario y ahí vamos a hacer extractos de la Cantata BWV 4 y tenemos invitado también al Coro Divertimento de la comunidad de coros alemanes en Chile, y vamos a compartir este concierto. También vamos a cantar el himno que celebra la vida y que tiene el poema de Dietrich Bonhoeffer».
Inicios del coro.
Ese concierto por el décimo aniversario de la agrupación se efectuará el 27 de abril a las 18:30 horas, también en la Iglesia Luterana El Redentor y con acceso liberado. Hanna Scharam puntualiza que «vamos a cantar canciones que hemos cantado ya durante los diez años y vamos a compartir con el Coro Divertimento, con el cual ya hemos cantado varias veces. También queremos recordar a quien nos dio el nombre a nuestro coro Dietrich Bonhoeffer, por los 80 años desde su martirio y expresar con el concierto y con las canciones que vamos a cantar, cuán importante es nuestra fe en un Dios que nos acompaña en lo bueno y en lo malo».
Vanessa Rojas cierra exaltando la belleza del repertorio que se escuchará: «Es música que realmente llega al corazón y muy bien hecha, preparada con mucha dedicación».
El célebre oratorio será interpretado por solistas, el Coro de Cámara UC y la Orquesta de Cámara UC desde el 14 al 16 de abril, con acceso liberado. El académico y virtuoso músico belga profundiza en cómo Haydn pinta la historia bíblica y aplaude la participación de estudiantes en estos conciertos.
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