Las clásicas balaustras dialogan en esta muestra con el hormigón, uno de los materiales más populares de la arquitectura reciente, tratado de una forma muy distinta a la habitual. Concentrada en su taller de la Ciudad Abierta de Ritoque, lugar donde creció y al que volvió para ejecutar su arte, la arquitecta y artista Victoria Jolly quiso explorar las posibilidades del hormigón según su tiempo de moldaje, enfatizando la flexibilidad de un medio al que solemos percibir de manera muy distinta: como material sólido, firme y macizo. El hormigón es el foco de su exposición  "Piedra blanda" , que se exhibe desde el jueves 14 de diciembre en la Galería del Diseño del Centro Cultural La Moneda.

Está abierta de 10:00 a 19:00 horas, de martes a domingo, con entrada gratuita y sin reserva previa, en Plaza de la Ciudadanía 26.

Las balaustras son un elemento arquitectónico que soporta la unión de balcones, terrazas, barandas o escaleras. Estas formas se encuentran presentes en muchas edificaciones a lo largo de Chile, la mayoría de principios del siglo XX, inspiradas principalmente en el estilo neoclásico europeo. Jolly eligió a las balaustras y el conjunto de estas -las balaustradas- como un icono de toda una época, muy vinculada a la conformación de Chile como una República autónoma. Y para elaborar una suerte de homenaje a la balaustra utilizó el hormigón, igualmente característico en las edificaciones más recientes.

En un espacio cultural ciudadano como es el Centro Cultural La Moneda cobró total sentido su interpretación o relectura de la balaustra, elemento presente en el Palacio de La Moneda que fuera bombardeado hace 50 años en el golpe de Estado. Distintos modelos ofrecen una relectura de las balaustras, hechas en hormigón curvado, detonando una continua idea de fragilidad, que pasa desde el tratamiento del material a la reflexión sobre el devenir político en la historia chilena reciente.

Regina Rodríguez, directora ejecutiva del CCLM, dice: “La Galería del Diseño ha acogido una diversidad de expresiones en torno a la cultura material, aquellos objetos que forman parte de nuestra vida cotidiana, la producción de gráficas que difunden voces y demandas colectivas, como también los procesos y elementos industriales en vinculación con el medioambiente. En este recorrido, el material se ha erigido como un protagonista en esta galería, y hoy el hormigón sorprende a través de formas curvas y sinuosas, elaboradas por Victoria Jolly. El diálogo del arte y la arquitectura, así como las distintas perspectivas que propone el diseño, constituyen el objetivo de este espacio”.

Victoria Jolly Mujica busca y configura sus propuestas de diseño desde la tecnología de los materiales, otorgándole a estos procesos toda la importancia en su obra. Explica: “El hormigón es siempre una inquietud cuando lo trabajas, pues hasta que no lo desmoldas no tienes idea cómo va a quedar. Es un laboratorio en donde se trabaja el moldaje y se aprende con las manos, es un lugar de experimentación donde el error constituye siempre una posibilidad que puede abrir nuevas líneas de investigación”.

Se formó en la Escuela de Arquitectura de Universidad Católica de Valparaíso, con una visión poética y filosófica de la disciplina. Profesores emblemáticos de la UCV crearon en los años 70 el proyecto Amereida en la Ciudad Abierta de Ritoque. Los padres de Victoria Jolly vivieron allí siendo ella muy pequeña, y hoy en su edad adulta quiso encauzar su propuesta desde ese lugar, concebido como uno para experimentar con todos los oficios: “A pesar de que estudié arquitectura, yo no hago edificios. En los trabajos que hago orbito la arquitectura, que está siempre presente. Me siento muy cercana a las acciones performáticas, realizadas a la intemperie, que hacían parte de la Ciudad Abierta en sus inicios: acciones conectadas al territorio y que pasan por el cuerpo”, dijo Jolly en una entrevista reciente.

Su estrecha vinculación con la Ciudad Abierta se manifestó artísticamente en la exposición El cuerpo ausente, presentada hace algunos meses en el Parque Cultural de Valparaíso. La propuesta puso en valor el papel de las mujeres en la formación y desarrollo de este proyecto, conocido mundialmente como una utopía americanista y moderna, que postuló formas alternativas de habitar. Con entrevistas, testimonios, material de archivo e instalaciones compuestas de maderas, totora y telas teñidas con cúrcuma, Jolly reflexionó en esta exposición multidisciplinaria de qué manera la vida y la praxis moldearon el proyecto Amereida, con la cotidianeidad y la presencia de las mujeres como una voz esencial, que no había sido considerada.

“No hago objetos para ser admirados, sino que dispongo un lugar para ser recorrido. Pienso, en realidad, que lo que hago son solo arquitecturas inútiles”, concluye.

La exposición "Piedra blanda" contemplará una serie de talleres abiertos, en torno al uso creativo del hormigón.

Información: Centro Cultural La Moneda.