Homenaje a Helmut Lachenmann y Rodrigo Rojas de Negri en la 59a Temporada de Cámara UC
julio 25, 2023
Diego Castro aborda la emblemática Salut für Caudwell del compositor alemán con Erik Marroquin y luego, con Cristián Alvear, El otro, el mismo de Miguelángel Clerc, que une las dos guitarras con una instalación de cuerdas, más el estreno en Chile de la obra mixta Irial, In memoriam Rodrigo Rojas de Negri (1967-1986) de Cristian Morales Ossio. En suma, recursos no convencionales, guitarras acústicas y eléctricas, memoria y una invitación al pensamiento crítico.
La música contemporánea se hace presente en la 59a Temporada de Cámara UC con un hito del repertorio para la guitarra y con dos obras chilenas, en el programa «Salut für Lachenmann!», en dos conciertos gratuitos. Ambos serán a las 19 horas, el martes 25 de julio en el Auditorio del Centro de Extensión Oriente (Jaime Guzmán 3.300, con inscripción aquí) y el miércoles 26 en el Teatro Joan Jara de la Fundación Cultural de Lo Prado (Paseo de las Artes 880, con inscripción aquí).
Las tres obras son para dúo de guitarras y en todas participará el profesor del Instituto de Música UC Diego Castro, quien actuará junto a los guitarristas Erik Marroquin y Cristián Alvear. El primero se tituló en Música UC y el segundo está cursando el doctorado en Artes en la UC.
La apertura será con el influyente compositor alemán Helmut Lachenmann (1935), maestro de Darmstadt desde 1978, con su más importante partitura para la guitarra: Salut für Caudwell, de 1977, en el estreno en Chile de la versión revisada de 2020.
Luego se escuchará música chilena: El otro, el mismo (2016) del compositor formado en el Instituto de Música UC Miguelángel Clerc, seguida por el estreno en Chile de la obra mixta Irial, In memoriam Rodrigo Rojas de Negri (1967-1986), de Cristian Morales Ossio, profesor de Música UC.
Diego Castro Magas (1978), director de Investigación y Postgrado de la Facultad de Artes UC, indica que la versión que se escuchará de Salut für Caudwell es fruto del trabajo de Lachenmann con Seth Josel. «Este guitarrista le dijo que en la edición clásica que todos conocíamos faltaba mucha información performativa, sobre todo lo que aportaron los guitarristas dedicatarios de la obra, Wilhelm Bruck y Theodor Ross, cosas que este dúo fue ajustando a lo largo de los años y que la nueva partitura recoge», explica.
Diego Castro: «Salut für Caudwell es la principal contribución de Helmut Lachenmann al repertorio de guitarra y, sin lugar a dudas, una de las obras cumbre de toda la literatura contemporánea para guitarra»
El profesor Castro ya abordó esta creación hace más de una década, con Luis Orlandini. «Me motiva revisitarla ya que esta nueva edición de la partitura resuena con mi propia visión del aporte que hacemos los intérpretes en la generación de nuevas obras. La noción más tradicional es que un compositor imagina unos sonidos ideales, los plasma en una partitura y luego los intérpretes hacen lo posible por hacerlos sonoros, pero obviamente entre la notación y la performance hay una incidencia creativa de los intérpretes», agrega el guitarrista.
«Salut für Caudwell es la principal contribución de Helmut Lachenmann al repertorio de guitarra y, sin lugar a dudas, una de las obras cumbre de toda la literatura contemporánea para guitarra. En su casi media hora de duración reconfigura absolutamente la manera de pensar el instrumento, y aunque fue escrita hace 46 años suena absolutamente actual, fresca y novedosa, como si hubiera sido escrita hace poco», recalca.
Diego Castro interpretará esta emblemática obra con Erik Marroquin, quien estudió guitarra con Luis Castro y composición con Aliocha Solovera en el Instituto de Música UC. «Aparte de que toca muy bien, de que es talentoso, es muy dedicado y comprometido», destaca.
Erik Marroquin (1995), en tanto, comenta: «Llevo varios años trabajando con Diego Castro, hemos realizado numerosos conciertos y grabaciones. No puedo sino estar agradecido de la posibilidad que he tenido, desde que era alumno, de participar en las temporadas y festivales del Instituto de Música UC y aportar de alguna manera en la escena nacional de la música contemporánea». Agrega que «siempre es un placer hacer música con Diego Castro, y más aun poder compartirla con una comunidad que se reúne en torno a la música. Este concierto es una invitación a mirar la guitarra bajo nuevos focos, y a maravillarse con las insospechadas facultades que nos ofrece».
Erik Marroquin: «Lo de Lachenmann es una invitación al pensamiento crítico y es también una invitación a un mundo sonoro inédito donde la guitarra, la vieja conocida de siempre, se viste con colores nuevos»
Asimismo, entrega su apreciación de Salut für Caudwell. «Es una de las obras más importantes que se han escrito para la guitarra. Por un lado, vamos a escuchar cómo el compositor, no conforme con el lenguaje que se había desarrollado hasta la fecha, propone nuevas maneras de pensar el instrumento, en una revisión profunda de la forma de abordar la interpretación de la guitarra. No se trata de buscar el sonido extravagante, a modo de pirueta o fuego de artificio; esto es un replanteamiento del material disponible», señala Erik Marroquin.
«Me parece muy importante relevar la cita que debemos declamar durante la obra; un fragmento del libro Ilusión y realidad, del escritor inglés Christopher Caudwell. Lachemann toma una sección del texto que está expresamente dirigida, como una especie de carta abierta, a lo que el autor llama ‘revolucionarios burgueses’, y en ella se decretan algunas máximas que todo creador o artista debería al menos considerar o revisar. Sin lugar a dudas, lo de Lachenmann es una invitación al pensamiento crítico y es también una invitación a un mundo sonoro inédito donde la guitarra, la vieja conocida de siempre, se viste con colores nuevos», agrega Erik Marroquin.
Las otras dos obras del programa, Diego Castro las interpretará con el guitarrista Cristián Alvear, quien se formó con Luis Orlandini en la Facultad de Artes de la Universidad de Chile y está cursando el doctorado en Artes UC. «Creo que es una de las voces más importantes, a nivel mundial, en la música experimental para la guitarra; ha grabado con muchos sellos especializados, ha hecho muchas giras y conciertos, tiene una actividad bastante extensa», destaca el profesor Castro.
Igualmente, revela que existe un punto de diálogo entre Salut für Caudwell y la obra que le seguirá: el interés que tiene Lachenmann en las técnicas extendidas y su activa voluntad para descentralizar el sonido, al tomar los ruidos colaterales o secundarios y volverlos principales.
Diego Castro: «En El otro, el mismo, Miguelángel Clerc extiende el dúo de guitarras, unificándolo en un solo instrumento, mediante una pequeña instalación donde tres pequeñas cuerdas unen distintas cuerdas de las guitarras»
Una búsqueda, indica el profesor Castro, que está presente en El otro, el mismo, de Miguelángel Clerc. «Él extiende el dúo de guitarras, unificándolo en un solo instrumento, mediante una pequeña instalación donde tres pequeñas cuerdas unen distintas cuerdas de las guitarras. Entonces se produce una sola guitarra extendida, pero con dos personas que la están operando, generando un efecto de interdependencia y de interacción que pasa a lo táctil. Se produce una tensión entre estas dos guitarras y eso genera efectos sonoros», explica.
Por ello, agrega Diego Castro, «el fenómeno de la tensión de las cuerdas y el movimiento de los intérpretes tocando esta guitarra extendida pasan a ser lo principal. En el fondo, Clerc descentra la idea del cuerpo como un medio para producir algo que la mente imagina; acá está primero la idea coreográfica del movimiento y de la tensión de estas cuerdas que tiene un impacto en lo sonoro».
El concepto coreográfico está en el centro mismo de la labor creativa que Miguelángel Clerc (1979) ha desarrollado en los últimos 15 años, según explica desde La Haya, donde reside hace 20 años. Su trabajo en la música electrónica y el diseño sonoro para la danza suma unas 40 piezas de las más de cien partituras que ha escrito. «Mi música de concierto, por otra parte, siempre se parece mucho al formato que verán en Chile, siempre tiene relación con el cuerpo».
Miguelángel Clerc se formó como compositor en el Instituto de Música UC, con el profesor guía Alejandro Guarello, director de Música UC (2006-2012). El otro, el mismo, fue estrenada en Chile en 2017, en el Festival de Música Contemporánea UC, por los entonces estudiantes Erik Marroquin y Vicente Barba.
Miguelángel Clerc: «Me interesa mucho que el cuerpo del intérprete sea un elemento que termina lo que no está presente en la partitura»
«Me interesa mucho que el cuerpo del intérprete sea un elemento que termina lo que no está presente en la partitura. Hay información que no está en la partitura y que tampoco tiene una representación auditivo; la única manera de que esos sonidos se representen y que aparezcan es a través de interacciones físicas. Uno necesita la interacción para descubrir qué es lo que realmente suena. En este caso, las guitarras están amarradas entre sí, entonces hay una interdependencia, de manera que cada acción de uno afecta el sonido del otro», explica Miguelángel Clerc. Que el cuerpo sea un elemento que genere sonido, indica, ha sido un foco de su trabajo creativo en los últimos diez años.
Con una sobresaliente discografía de 38 producciones, Cristián Alvear (1979) es una figura con peso propio en la música experimental. Fue nombrado «Artista del año» en 2015 por la revista estadounidense Tone Glow y al año siguiente la revista Remezcla de Nueva York lo eligió como uno de los nueve artistas latinos que están cambiando la forma en que se hace la música. «Siempre me ha interesado el repertorio de música contemporánea», declara el guitarrista osornino. Será la segunda vez que actúe en la Temporada de Cámara.
Cristián Alvear: «El otro, el mismo, la obra de Miguelángel Clerc explora de una manera bien interesante lo que se puede hacer con dos guitarras»
Respecto de El otro, el mismo, la obra de Miguelángel Clerc que interpretará con Diego Castro, Alvear aclara que lo que pide el compositor es inusual. «Yo trabajo con harta técnica extendida, pero nunca me había tocado participar en una pieza en que las dos guitarras están conectadas de una manera que hace que la operación del dúo, las sincronías, sean mucho más complejas, porque requieren de coordinaciones que van más allá de simplemente calzar notas. Y también hay involucrados movimientos. Creo que es una pieza que explora de una manera bien interesante lo que se puede hacer con dos guitarras», señala Cristián Alvear.
Además, detalla cómo funciona el sistema: «Son cuerdas que están amarradas unas con otras. Ha sido todo un tema ensayar la obra, porque como las cuerdas hay que estirarlas, para poder controlar eso hay que moverse para adelante y hacia atrás. Normalmente uno se concentra simplemente en la producción de sonido con las manos, pero involucrar el cuerpo completo es un desafío. La interpretación juega un rol súper importante, porque hay que tomar un sinfín de decisiones, no sólo por las idiosincrasias propias de los instrumentos, sino por las tensiones y el tipo de cuerdas que conectan las dos guitarras, entonces hay que elaborar estrategias interpretativas en base a lo que se utiliza, y eso es bastante inusual».
Diego Castro: «Cristian Morales trabaja con sistemas microtonales y la guitarra permite muchas posibilidades entre los semitonos, produciendo colores que son muy expresivos»
Cristian Morales Ossio (1967) es una figura central de la escena electroacústica nacional y, además, enseña composición, orquestación y música electroacústica en el Instituto de Música UC. Su catálogo como compositor es macizo e incluye significativos aportes artísticos en términos del desarrollo del lenguaje. En paralelo, exhibe un permanente trabajo con instrumentistas, con foco en expandir y profundizar los alcances de la colaboración creativa entre compositor e intérprete.
El cierre de los conciertos del 25 y 26 de julio será con el estreno en Chile de su obra Irial, In memoriam Rodrigo Rojas de Negri (1967-1986). La pieza, para dos guitarras y electrónica en vivo, fue compuesta en 1996, a diez años del asesinato del joven fotógrafo chileno.
El profesor Diego Castro aclara que la versión que se escuchará corresponde a una revisión: «Va a ser tocada por primera vez con dos guitarras eléctricas, ya que nos dimos cuenta de que el color de estos instrumentos resonaba mejor con el material de la electrónica en vivo, y se corresponde también mejor con el afecto que busca el compositor».
Asimismo, indica que «la preocupación de Cristian Morales tiene que ver principalmente con la definición de las alturas; él trabaja con sistemas microtonales y la guitarra permite, mediante afinaciones con scordatura, muchas posibilidades entre los semitonos, produciendo colores que son muy expresivos. El carácter o afecto de esta pieza tiene que ver con una especie de llanto, con gemidos y con la pérdida, conmemorando obviamente a quien homenajea y las circunstancias de su muerte».
Cristian Morales Ossio: «El uso de los cuartos de tono, en Irial, obedece a la necesidad expresiva de representar un lamento por Rodrigo Rojas de Negri»
Cristian Morales Ossio profundiza, desde México, en cuán crucial es la expresividad de su obra, mencionada por el profesor Castro. «Irial es una de las primeras obras donde exploro los cuartos de tono, evidenciados en las posibilidades de afinación que posee la guitarra y los instrumentos de cuerdas en general. Sin embargo, en esta obra el uso de este recurso obedece más bien a la necesidad expresiva de representar un lamento por Rodrigo Rojas de Negri. Al momento de la composición, la experimentación e improvisación con una guitarra afinada especialmente me llevó a imaginar una música que representa a un llanto, al espantoso dolor que tanto Rodrigo como Carmen Gloria Quintana debieron haber sentido al ser quemados sin piedad por los militares. Por lo tanto, junto al recurso puramente sonoro y gestual que señala Diego, hay una dimensión de representación que no se puede desconocer en la obra», explica.
Apunta, además, que la parte electrónica de la obra se estrenó en el XI Festival de La Habana, en 1996, y luego la obra fue estrenada íntegramente en Gante, Bélgica, por los guitarristas Matthias Koole y Kobe Van Cauwenberghe, en 2008.
«La programación de Irial es, sin duda, especialmente importante en el contexto histórico en que surge, pues se trata de una elegía al asesinato de Rodrigo Rojas de Negri, quien fue asesinado brutalmente por una patrulla militar en medio de una de las protestas populares más intensas contra la dictadura de Pinochet. No sólo conmemoramos el inicio de una administración fatídica, sino también una forma de actuar del Estado que desgraciadamente ha reaparecido en no pocas ocasiones. Creo que, a medio siglo del golpe de estado, creer que se ha hablado demasiado sobre este tema se vuelve una irresponsabilidad. Irial pretende, desde una música entendida como un lamento, más bien contribuir a iniciar una conversación que parta del rechazo al negacionismo y que acepte nuestra historia tal cual es», agrega el compositor.
Para Cristian Morales Ossio, «es una responsabilidad académica y artística fomentar la memoria, desde una perspectiva crítica, a través del diálogo con los más jóvenes. Por ejemplo, la discusión sobre la pertinencia de obras artísticas que, más allá de la contingencia política, contribuyan a la elaboración de una memoria colectiva que sea la base de una democracia real. En este sentido, también me encuentro componiendo una obra para percusión, danza y video, Elegía-Memorial, que será estrada en septiembre de este año con motivo de la conmemoración de los 50 años del golpe militar».
Cristián Alvear: «En la obra Irial, In memoriam Rodrigo Rojas de Negri (1967-1986) es muy interesante el uso de un tipo de escritura que deja bastante libertad al intérprete, pero hay que estar bien atentos a los puntos de sincronía»
Cristián Alvear aporta que en Irial, In memoriam Rodrigo Rojas de Negri (1967-1986), «es muy interesante el uso de un tipo de escritura que deja bastante libertad al intérprete, pero hay que estar bien atentos a los puntos de sincronía, porque además de sincronizarnos con Diego Castro tenemos que sincronizar la partida de la electrónica y estamos trabajando con una video partitura que tenemos que ir siguiendo en tiempo real. Tenemos que ponernos mucha atención entre nosotros».
Valora positivamente que se interprete esta obra a 50 años del Golpe de Estado. «Me parece que es fundamental que este tipo de repertorios puedan conectarnos, más allá de su carácter musical, y que puedan visibilizar cosas que son importantes de conmemorar a 50 años del Golpe. En ese sentido, creo que la pieza se vuelve aun más contingente», cierra el guitarrista.
Por Romina de la Sotta Donoso | 22-07-2023 | Reportaje publicado originalmente en musica.uc.cl.
Desde música del siglo XII hasta La Pasión de Scrooge de Jon Deak y Hansel y Gretel de Engelbert Humperdinck, pasando por célebres creaciones de Bach, Haendel, Berlioz, Liszt y Messiaen, además de la ópera Vísperas de Navidad de Rimsky-Korsakov, la cantata Navidad en Chile de Pablo Délano y una sesión jazzística de Dave Brubeck son parte de nuestra programación especial.
Además de entregar las claves de los conciertos gratuitos de Navidad que la Camerata Unab ofrece con distintos coros y solistas durante diciembre, Felipe Karadima hace un balance positivo de este año, con cerca de 90 actividades, y anticipa los hitos de 2025.
Invitado por el Instituto Italiano di Cultura, el pianista piamontés abordará un repertorio que él mismo está rescatando en dos conciertos gratuitos que dará en Los Andes y Viña del Mar, el 29 y 30 de noviembre. "Estos compositores desarrollaron una importantísima operación de aggiornamento cultural porque tradujeron y trajeron a Italia a los grandes románticos alemanes", apunta.
El lunes 25 y martes 26 de noviembre, estrenará con Luis Orlandini y Gonzalo Cuadra obras comisionadas a Eleonora Coloma y a Rolando Cori. Y, el viernes 29, Alejandro Reyes ofrecerá una lectura nueva de la 2a Partita BWV 1004 de Bach, incluyendo corales y bajo continuo, junto a Vanessa Rojas, Javier Weibel y Oriana Silva, ahondando en el desgarrador luto que vivía el compositor. Dos nuevas propuestas artísticas paralelas a su rol en el Municipal de Santiago.
El estudiante de piano de la Universidad Austral y su colega Alejandra Veloso grabaron diez obras del compositor alemán en el disco Valdivianische Musik. Algunas son para piano solo y otras para piano a cuatro manos. Lo lanzarán el 21 de noviembre en Valdivia y el 29 en Concepción.
"Ellos superaron los límites de lo que se consideraba posible en el piano", indica Boris Giltburg y añade que en las sonatas que interpretará el 26 de noviembre "hay un cuento que la música quiere transmitir al público". El célebre pianista también entrega detales de sus grandes proyectos: la integral de Beethoven y El clave bien temperado.
El director chileno destaca la flexibilidad de la orquesta penquista, que lo eligió como su titular a sólo mese de su debut con la agrupación. Luis Toro Araya adelanta que planea hacer ópera y que es primordial darle espacio a los compositores nacionales jóvenes. Este mes está en Chile: el 7 y 8 de noviembre, vuelve a dirigir a la Sinfónica Universidad de La Serena, en los Wesendonck Lieder de Wagner, Beethoven y Schubert. Y después conduce a la Sinfónica UdeC.
El director y fundador de esta agrupación que tiene 20 años de existencia, hace un positivo balance de las recientes alianzas que han hecho y los nuevos públicos que están acerándose a una temporada que continúa e 23 de octubre con tres solistas nacionales. "Hemos tenido muchos solistas de muy buen nivel, con el apoyo de varias embajadas", comenta.
La obra fundamental del siglo XX será presentada en la 60a Temporada de Cámara UC el 22 y 23 de octubre, celebrando así los 150 años del natalicio de Arnold Schoenberg. El director chileno residente en Suiza, además, dirige a la Sinfónica Nacional Juvenil en la Séptima de Beethoven.